De acuerdo a un estudio de mercado, realizado por la consultora GFK Perú, uno de los drivers o motivadores más importantes que desencadenan la compra de diarios es el HACER, es decir, todos los juegos de palabras o letras que un diario trae, como crucigramas, pupiletras, sudokus, etc.
Aunque suene paradójico, los compradores de diarios dicen “no tener mucho tiempo para leer” pero pueden pasar hasta 20 minutos tratando de resolver su crucigrama favorito.
Beneficios de resolver juegos de palabras
Los crucigramas aportan cultura e invitan a la búsqueda de palabras que ignoramos, aunque de vez en cuando hagamos la trampita de “googlearlas”, o mirar el diccionario. De cualquier modo, el objetivo final se cumple, estamos aprendiendo.
Además de entretenernos y aportarnos conocimiento, los juegos de palabras son beneficiosos para la salud mental. Los médicos recomiendan resolver crucigramas como una forma de mantener las neuronas funcionando a la mayor capacidad posible. De hecho, intentar solucionarlos ayuda a mejorar el rendimiento de las funciones cognitivas (memoria, pensamiento, lenguaje y percepción). No es casual que muchos los definan como “medicina para el cerebro” o “gimnasia cerebral”.
Hoy en día que la capacidad de redactar de la población está tan venida a menos y que nuestra ortografía se ha deteriorado enormemente, la práctica de resolver crucigramas se vuelve más relevante.
Junto con todas las ventajas expuestas, los juegos de palabras tienen la virtud de constituir un reto para quien trate de resolverlos, y, la gratificación que se siente al completar su solución, aunque sea con una pequeña trampa, resulta suficiente estímulo para emprender la tarea.
Un poco de historia
Aunque se perciben como el juego más popular en el mundo, los crucigramas tienen una historia reciente. El primer crucigrama fue publicado en 1913 en el diario estadounidense New York World, por Arthur Wynne, un periodista inglés. Este diario jugó un rol muy importante en la historia del periodismo norteamericano. Fue el vocero del partido demócrata y entre 1883 y 1911, fue dirigido por Joseph Pulitzer, en cuyo nombre se creó el famoso premio de periodismo, convirtiéndose en el pionero del periodismo “amarillo”.
Oportunidad publicitaria
La popularidad de los juegos de palabras es transversal a los niveles socio económicos, género y edad, todos disfrutan tratando de resolverlos. Así pues, por su gran aceptación, el tiempo que los lectores pasan frente a ellos y los beneficios que se les atribuyen, son una gran oportunidad para los anunciantes. Los avisos tienen mayor impacto como consecuencia del tiempo que los lectores les dedican; y las marcas que se anuncian junto a los crucigramas se vinculan con los beneficios percibidos en estos elementos de entretenimiento. Las marcas vinculadas a la educación y salud, principalmente, no deben dejar pasar esta oportunidad.
Autor: María Elena Otiniano – Representante de la SEPP
Fuente: Des-plumada.blogspot.com